Ben y Parets

Ben Graff es un grafitero de Parets del Vallés, en la riera de Parets, la misma en la que se realiza el Festival de Graffiti "Los 200 escritores", Ben pinta y boceta mucho, el "big pig" es su personaje más conocido y lo va pintando por toda la comarca . El Pois , un amigo suyo pinta también en Parets , su prima Bebe , sus amigas Risa y Vida también pintan allí y unos cuantos incondicionales más. Ben es un dibujante de carácter ,, pertenece a la crew Ogb, con Ohen, Bone, Rasta, Sohen, Dyse...que también pintan en la riera de Parets. Ben es un carismático grafitero con una gran personalidad , su obra destaca por su singularidad, normalmente firma Ben Graff para sus dibujos en paredes y Big Pig cuando pinta sus cerdos marcando territorio. Ben es un dibujante genial y su paraíso son las tranquilas paredes de la riera de Parets.







Dades personals

La meva foto
Fotos de graffiti Barcelona : http://mikelfalcon.blogspot.com/ Zembat denboran izango zaitugu, jauna ?/2012 /També estem a www.flickr.com/photos/mike_falcon/3665178093/ www.flickr.com/photos/mike_falcon/3665996840/






Riot Über Alles habla claro... una artículo de bcnstyle.ekosistem.org


COGITO ERGO QUE TE JODAN
Posted: 21 Oct 2008 01:06 PM CDT
CUADERNOS DE JUSTICIA POÉTICA, 001.
Primero, dado que me considero una persona moderadamente educada, me presentaré:
hola. Me llamo Riot Über Alles.Soy diseñador gráfico, pues con ello me gano la vida y la comida. A parte de esto, también me considero pintor, poeta, proxeneta, miope y maniaco-depresivo diagnosticado.Esto último lo atribuyo mayormente a mi tendencia declarada hacia la politoxicomanía y el alcoholismo de primer grado (véase el alcohólico/a que consume grandes cantidades de vino, cerveza, patxarán, vermut y demás licores de baja gradación sin límite de tasa, ignorando a priori el problema que le acontece ya que, dado su inclinación concordante con el perfil del llamado bebedor social, suele pasar desapercibido, a pesar de que su “problema” es quizás más grave que el situado en un grado superior y más fácilmente atajable).
Bien.Ahora ya nos conocemos. digo “nos conocemos” porque, per se, yo ya os conozco a vosotros. Y ahí radica la gracia de esta, llamémosla así, columna, aunque su forma física no concuerde con su definición.
Bien.¿Ya? Lo he oído. No, no te conozco. Claaaaaaro. Tú eres particular. Tú no sigues ningún tipo de corriente-ni-estereotipo-y-siempre-eres-horrorosamente-coherente, y precisamente por eso entras en esta página de EKOSYSTEM. Porque buscas todo lo especial que convive en ti. Vale, cojonudo.Me han entrado ganas de llorar.
Ahora que (gracias a las particularidades del género epistolar) he llorado lo suficiente como para paliar lel hastío que me atenazaba el corazón y la boca del estómago al descubrir que, efectivamente, tú también formas parte de ese 99% de humanidad susceptible de neutralización (así lo llamaban los agentes secretos de la STASI), puedo empezar con mi diatriba.
“Por qué” es una buena pregunta.Me explicaré. supongo que, por lo menos, esto SÍ os lo merecéis.Yo era lo que se llamaba un “graffitero”. Un “graffitero”, para quien no lo sepa, es una persona que pinta en cualquier superficie del denominado espacio público. La palabra “graffiti” deriva de graffito, que significa ‘marca o inscripción hecha rascando o rayando un muro -de la vía pública-’ y así se llaman las inscripciones que han quedado en las paredes desde tiempos del Imperio Romano. Raffaele Garrucci divulgó el término en medios académicos internacionales a mediados del siglo XIX (fuente: Wikipedia.)Okey, la pintura cuenta. Hoy por hoy cuenta.
Por tanto, y ateniéndonos rigurosamente a las acotaciones terminológicas, Richi el gitano, natural de Barón de Viver, realizó hace poco el siguiente graffiti en las lindes del ayuntamiento de susodicho barrio: “Jessi, te quiero más que a mi madre. Viva España y viva yo”. Brillante, qué duda cabe. Lástima que la esvástica estuviera dibujada al revés.Y, ¿cuál es la diferencia sustancial entre Richi el gitano (y, por ende, de su parienta Jessi, la cual, previa especulación, tuvo a bien contestarle flagelando temblorosamente su eye-liner en alguna de las desafortunadas paredes colindantes al lugar de los hechos) y los “artistas” que se presupone que representan la punta de lanza del arte urbano de las principales ciudades europeas (y también en las que componen el llamado extrarradio o ghetto)?
RESPUESTA: LA (MUY OSADA) CONSIDERACIÓN DE QUE SU ACTO SUPONE UN ACTO ARTÍSTICO.
Me han entrado, de nuevo, ganas de llorar. Poco, por eso. Lo justo.
Ya.
Por fin hemos entrado, de cabeza y de pies juntillas, en el asunto que nos ocupa.Es decir, Taki 187 no tenía, realmente, una conciencia artística. NO. No insistas. Puro ego, y lo sabes.No, por lo menos, como la tienen aquellos que ven con demasiados buenos ojos su actividad en la calle. Cuando una persona se autodenomina “graffitero/a-” tal y como se entiende en el contexto contemporáneo que nos ocupa,se olvida de una cosa fundamental: PINTAR EN LA CALLE NO ES SINÓNIMO DE CONVERTIRSE EN ARTISTA CONTEMPORÁNEO SUSCEPTIBLE DE SER CAPTADO POR LAS DIVERSAS SECTAS DAVIDIANAS DE CARÁCTER POST-CONTEMPORANEO (ROJO, VAQUEROS DE BARCELONA, LECOOL, LAMONO Y DEMÁS NIDOS DE LARVAS). Y quien no lo ve de esta manera (que, por supuesto, los y las hay) todavía se aferran a unos cánones carpetovetónicos de pseudo-revolución enlatada (by Montana Inc.) en los que proyectan unos clichés trasnochadísimos que incluyen, entre otras cosas, la representación por barrios (hooooooola, estamos en BARCELOOOOONA, ciudad post-olímpica y de poco que no post-nuclear!!!!), o la estúpida idea que el acto vandálico es sinónimo de antipatía por un sistema que ni nos representa ni nos acepta (a esto diré que, si quieren ver actos vandálicos, que se paseen un sábado por San Andrés, por la Vila Olímpica, por el Raval o por la Zona Franca, y verán lo que es vandalismo institucional y/o industrial, mucho más heavy que el que cualquier matado/a puede perpetrar con una lata rojo fiebre y un marrón breakfast, new york fatcap incluided).NOTA MENTAL: QUEMAR Y/O PINTARRAJEAR CAJEROS DA MUCHA PASTA A LOS BANCOS IMPLICADOS. SUS SEGUROS A TODO RIESGO SON VERDADERAMENTE EFICIENTES.
Buenos días.
Sobre aquellos/as que simplemente pintan porque creen que deben hacerlo, sin más pretensiones, sin ambiciones más allá del espíritu de autocomplacencia que ha de alimentar, necesariamente, cualquier postulado artístico más allá del que ha de ser para y por uno (creador/a), TIENEN TODO MI RESPETO. Seguid ahí. Ah, y gracias por todo, de verdad. Gracias. Más allá, mucho más allá de la objetiva aportación artística con la que nos premiéis, es vuestra actitud la que nos libra de Gomorra. Por lo menos hasta ahora.
Pero, a todos aquellos/as que piensen que la calle es el vehículo para proyectar su penosa obra más allá del mero gesto de transgredir el orden natural de las cosas, os digo: SOY VUESTRO ENEMIGO. Y, además, sé quienes sois. Y me tenéis harto. Me toca profundamente los huevos vuestra desfachatez, vuestra falta de congruencia. Porque, ¿sabéis lo peor? Lo peor es mirar vuestras caras de filisteos para darme cuenta que, a pesar que, quizá, en vuestras charlas con la almohada o cuando habláis con el espejo, sabéis que sois unas ratas vendidas y que vuestra hipocresía lleva irremisiblemente al suicidio de cualquier tipo de conciencia activa o útil, seguís con vuestras patrañas ignominiosas, vuestro merchandising, vuestros pijamas de diseño, vuestros murales para grandes marcas o vuestros trabajos gráficos para tiranos del diseño y la imagen, solo por afán de notoriedad y ansia de reconocimiento. ME DAÍS ASCO. Y ADEMÁS PINTÁIS COMO EL CULO.
Y no, no voy a dar nombres. Por lo pronto.
Y quiero que quede muy muy clarito que no ME PRODUCE ASCO QUE SEAS UN VENDIDO, lo que me da ganas de vomitar es que, A PESAR DE SER UN VENDIDO (la cual cosa puedo llegar a entender, yo soy el primero que se vende por cuatro cuartos y comprendo que hay que pagar las facturas), LO QUE MÁS ME JODE ES QUE, ENCIMA, TENGAS LA CARA DE IR POR AHÍ DICIENDO QUE ESO “NO VA CONTIGO”. Tal actitud desvirtúa el gesto y lo convierte en aspaviento, en una ridiculez que, aunque no lo calcules correctamente (porque quizá las parábolas no son lo tuyo, así como tampoco los diagramas cartesianos), todo el mundo percibe y, en mayor o menor grado, desaprueba.
Yo soy la persona más despreciable que os podéis echar en cara: bebo, fumo rubio, me drogo, mis padres viven en una nebulosa falacia, me postro ante cualquiera si es necesario, pongo mi talento al servicio de quien paga, soy adicto al porno heterosexual y además soy hipocondríaco. Pero POR LO MENOS NO ENGAÑO A NADIE. Hola, me llamo Riot Über Alles y creo esto.
¿Y tú?
Continuará, lo prometo. Esto solo es el principio.
SÍ. Es una amenaza.